Queridos amigos:
Este mes ha tenido muchos matices cosas buenas e Inspiradoras y cosas difìciles y dolorosas para nosotros. Todos los meses ustedes reciben una carta de oraciòn donde compartimos las necesidades y experiencias que vivimos en esta Comunidad de Lima Perú, es la segunda vez que me toca a mi como peruana escribirles una carta de oraciòn y quiero aprovechar la oportunidad para agradecerles su compañìa en oraciòn y su apoyo a la labor que hacemos aquì en mi tierra.
Estuve orando para saber que escribirles y como hacerlo pues son muchas las cosas que compartir; Esta última semana fuimos invitados a exponer en un congreso a nivel Latino Americano de trabajadores con niños. Organizado por Go Internacional un tiempo de mucha bendiciòn para nosotros En esa semana dio su testimonio una amiga muy querida que ya esta fuera de las calles donde viviò por mucho tiempo y donde sufriò mucho desde muy pequeña. Fue un tiempo conmovedor y de gratitud a Dios al ver delante de nosotros la manifestaciòn de su obra redentora.
Pero, al mismo tiempo hemos vistos a nuestros amigos en muchos momentos difìciles. De desanimo de luchas de recaìdas en el mundo de las drogas, chicos y chicas que ya estaban mejor pero cayeron nuevamente en las garras de Satanás. Amigos, el dolor es muy grande en nuestros corazones cuando un amigo que amamos sufre al estar en oscuridad nuevamente eso a algunos de nosotros nos hace levantar los ojos al cielo y decir Señor danos sabidurìa, Señor ten misericordia, mira a esa niña que ve a su madre que ama tanto drogarse y perderse en la depresiòn una vez mas.
Pienso que en esta oportunidad hay un pedido que puede encerrar el sentir de esta carta. y este es el de Clamor. Si! Les pido desde aquì lima Perú a ustedes, que hagan un alto a sus múltiples ocupaciones y andar diario para recordar a esta ciudad y este Ministerio y Clamar al Padre de la mies para que mire a sus criaturas que están luchando por salir de las calles o luchando para no regresar a ellas, Clamen hermanos clamen al Padre por esta comunidad para que Dios nos otorgue sabidurìa y fortaleza para responder con fidelidad a su llamado.
En esta oportunidad les pido esto y les agradezco por cada minuto que nos recordaran en Oraciòn.
Quizás no están aquì con nosotros caminado las calles, quizás no puedan nunca estar al lado de esta niña que ve a su madre perdida en el terockal. Pero sus oraciones si pueden llegar a ellos, sus oraciones si pueden sostenernos a nosotros en nuestro andar.
Gracias por compartir lo que dios les da con nosotros y Gracias por leer esta carta No los conozco quizás algún dìa pueda ver sus rostros pero ahora Se que nos une el mismos Padre y un mimo clamor a El.
Que El Señor les bendiga grandemente
Anna Monteviller Pino
Directora de Programas
La Palabra Hecha Hombre